Cada 27 de julio se conmemora el Día Internacional del Perro Callejero.
La iniciativa surgió en 2008 por el periodista chileno Ignacio Gac. Esta fecha busca fomentar la adopción y concientizar sobre la mala vida de miles de animales en la calle. El periodista eligió el mes de julio, debido a que las bajas temperaturas del invierno exponen a los perros de la calle al frío y a contraer enfermedades.
Como una salida a esta problemática, Gac propuso la adopción de perros para apuntar a dos objetivos: reducir la cantidad de perros que deambulan por las calles y que tengan un hogar y un cuidado responsable.
La adopción de un perro es un acto de responsabilidad y compromiso. Cuidarlos no sólo implica alimentarlos sino que también se debe tener en cuenta otros factores como la atención veterinaria, el espacio adecuado, el cuidado y la educación.
En Argentina, existen leyes contra el maltrato animal, entre las que se destaca la Ley 14.346 del Código Penal que considera a la crueldad como un delito. La misma dicta: “Será reprimido con prisión de quince días a un año, el que infligiere malos tratos o hiciere víctima de actos de crueldad a los animales”.
Actualmente, en nuestro país se estima que 5 millones de animales viven en la calle, entre ellos se encuentran los perros. Además, 9 de cada 10 animales que nacen en la calle nunca encuentran hogar. El 95% de los municipios del país no realiza campañas de castración gratuitas y masivas para control poblacional de animales.
Según las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud y World Society for Animal Protection (WSPA), la única manera de detener la sobrepoblación canina callejera es la esterilización y la educación ciudadana.
Fuente: perfil.com