Así lo aseguró Leandro Vargas, su titular oriundo de Santo Tomé, quien tomó las riendas del local hace menos de 1 año y lo está llevando por muy buenas sendas. «Arrancamos como un kiosco y hoy tenemos vinos, champagne, cervezas, productos de almacén, hielo, productos de planificación, hasta pañales. Aceptamos todas las tarjetas y aplicaciones de pago, atendemos en un horario muy amplio con 3 empleados, mi mujer y yo», detalló.
Uno de los secretos radica en los buenos precios, en particular, de cerveza. El horario de atención es de lunes a jueves de 9:00 a 23:00 hs., en tanto los viernes y sábados de 9:00 a 2:00 hs., es decir, 18 horas abierto sin interrupción.
«Ya excede la atención a los vecinos del barrio y llegan sancarlinos de otros puntos de la ciudad, hasta vecinos de pueblos de la zona», concluyó.